
La televisión estatal venezolana emitió el miércoles un video del estadounidense capturado Luke Denman, en el que dice que fue contratado por una empresa de seguridad de Florida para tomar el control del aeropuerto de Caracas y traer un avión para llevar al presidente Nicolás Maduro a los Estados Unidos.
Las autoridades venezolanas arrestaron el lunes a Denman, al ciudadano estadounidense Airan Berry y a otras 11 personas en lo que Maduro ha llamado un complot fallido coordinado con Washington para entrar al país por la costa caribeña y expulsarlo.
«Donald Trump es el jefe directo de esta invasión», dijo Maduro durante una conferencia de prensa virtual televisada, después de que se emitiera el vídeo de Denman.
El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, ha negado su participación. El Secretario de Estado Mike Pompeo dijo el miércoles que el gobierno de EE.UU. usaría «todas las herramientas» para asegurar el retorno de los americanos, si estuvieran detenidos en Venezuela.
Un alto funcionario de la administración Trump dijo que las acusaciones de Maduro y sus aliados de la participación de EE.UU. «no son creíbles, y de hecho, son casi cómicas».
«La administración sigue centrada en nuestros objetivos políticos de lograr una transición pacífica y democrática en Venezuela», dijo el funcionario.
En el video, Denman, de 34 años, respondió a las preguntas de una persona fuera de cámara hablando en inglés. Denman, que parecía tranquilo y llevaba una camiseta gris, dijo que su misión era asegurar el aeropuerto y establecer la seguridad exterior. No dio detalles de cómo su grupo planeaba subir a Maduro a un avión.
No estaba claro cuándo o dónde se hizo el video, y dónde están detenidos Denman y Berry.
Los grupos de derechos y los líderes de la oposición en Venezuela acusan rutinariamente al gobierno de extraer declaraciones falsas de los detenidos que están siendo interrogados por los servicios de inteligencia, que han sido acusados por las Naciones Unidas de tortura.
En marzo, el Departamento de Justicia de Estados Unidos acusó a Maduro y a una docena de otros funcionarios venezolanos actuales y anteriores de «narcoterrorismo» y la administración Trump ofreció una recompensa de 15 millones de dólares por la información que condujera a su detención.
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«Estaba ayudando a los venezolanos a recuperar el control de su país», dijo Denman, ex miembro de las fuerzas de operaciones especiales, en el video.
Denman dijo que él y Berry fueron contratados por Jordan Goudreau, un veterano militar estadounidense que dirige una empresa de seguridad con sede en Florida llamada Silvercorp USA, para entrenar a unos 50 venezolanos en Colombia en enero para la operación. Goudreau proveyó al grupo con equipo, dijo Denman.
Goudreau confirmó su papel como organizador de la operación en entrevistas con los medios de comunicación el domingo y dijo a Reuters el lunes que Denman y Berry eran «mis chicos». No se le pudo localizar inmediatamente para hacer un comentario el miércoles.
Las autoridades venezolanas dijeron que arrestaron al grupo en la aislada ciudad costera de Chuao, a unos 60 kilómetros al oeste del aeropuerto de Caracas, después de que los lugareños levantaran sospechas. Las autoridades publicaron fotos de lo que dijeron que era el barco del grupo, cargado con municiones, armas y equipo de comunicación.
Ocho personas involucradas en la misma operación fueron asesinadas el domingo en el estado de La Guaira, cerca de Caracas, dijo el gobierno de Maduro.
Maduro había dicho originalmente que mostraría videos de los dos americanos, pero no terminó mostrando un video de Berry.
Denman dijo en el video que Silvercorp había firmado un contrato con el líder de la oposición venezolana, Juan Guaido, para buscar la remoción de Maduro. El equipo de Guaido, en un comunicado, dijo que no tenía «ninguna relación con ninguna empresa de la rama de seguridad y defensa», incluyendo Silvercorp.
Venezuela solicitaría la extradición de Goudreau, dijo Maduro.
Maduro dijo que la Administración de Control de Drogas de EE.UU., a través de los cárteles de la droga, eran la «parte operativa y logística de esta conspiración».
Una portavoz de la DEA dijo que la DEA no estaba involucrada en los eventos.
Después de la declaración televisada de Denman, un portavoz del Departamento de Estado de EE.UU. dijo que «debido a consideraciones de privacidad» no tendría más comentarios sobre los dos estadounidenses que supuestamente están en custodia de Venezuela.